Ascensión Pico Tempestades

Pico Tempestades

País(es)	España
Provincia(s)	Huesca
Coordenadas	42°38′47″N 0°38′25″ECoordenadas: 42°38′47″N 0°38′25″E (mapa)
Altitud	3.290 m
Prominencia	72
Cordillera	Pirineos

Fecha de la ascensión: 17/06/2017
Desnivel subida: unos 1400 m

Distancia: 12,35 km

Dificultad: Moderada técnica y físicamente
Tiempo de la ruta: Unas 10 horas con muchas paradas
Tipo de ruta: Ida y vuelta

 Volvemos de nuevo al los Pirineos, esta vez a Benasque, donde hacia tiempo que no me acercaba, para hacer un nuevo pico, esta vez queríamos hacer mínimo un par de tresmiles, pero yo me quede solo con uno por falta de fuerzas, que le vamos hacer, un último esfuerzo peligroso que hice en un momento dado me dejo a menos de 25 metros del Margalida que era el segundo objetivo.


 El primer objetivo del día era el Tempestades, una subida exigente, con un gran desnivel en muy pocos kilómetros, que nos obligaba a madrugar mucho para no comernos toda la calor que estaba haciendo en plena hola de calor de junio.

Salimos viernes por la mañana, dirección Benasque, hacia el refugio libre de Pescadores, en la zona de Vallibierna, donde era importante llegar a tiempo para poder tener sitio donde dormir, como siempre el viaje a Benasque desde Valencia, se hace largo, pero peor fue la pista de subida hasta el refugio, que desde luego en un coche normal yo no subiría, las condiciones bastante malas, con desprendimientos, agujeros y demás historias por arreglar a solo una semana de que la cerraran y solo se pueda subir en bus.

Anochecía sobre el culebras y Vallibierna

Son las 6:15 del sábado, empezamos la subida, primero hacia la Pleta de Llosas y luego dirección Ibón de Llosas, hace frío y vamos abrigados, pero al poco la ropa empieza a molestar, en un buen ritmo no tardamos en llegar al Ibón, increíble ver lo que nos rodea, hacemos una primera parada para disfrutar del momento y hacer unas fotos, llevaremos una hora de subida y aun nos quedaba lo mas complicado y lo mas duro.

Ibón de Llosas

Sobrepasando el ibón

Ibon Superior de Llosas

Continuamos por un camino claro al encontrarnos ya el primer nevero con bastante huella, camino del Ibón Superior de Llosas, lo atravesamos y seguimos, aquí hay un par de momentos de confusión, porque no teníamos claro el camino a seguir, tras varios errores , nos toca retroceder un poco y atravesar por lo que deducíamos que deberíamos de continuar, aquí la cosa se empina mucho y empieza a complicarse, los distintos riachuelos de la nieve derritiéndose nos complica un poco el avance.

Mirada atrás hacia el Vallibierna, seguíamos subiendo

Tras un tramo de mucho esfuerzo decidimos hacer una corta parada para reponer fuerzas y observar por donde teníamos que seguir, avanzamos un poco y pronto nos damos cuenta de que era el momento de ponerse los crampones, pues la nieve ya nos nos abandonaría hasta la cima, nos sorprendió ver tanta cantidad de nieve a estas alturas de junio, estaríamos a unos 2800m y parecía que estábamos en pleno mes de marzo.

Y menos mal que era nieve, sino menudo pedregal nos íbamos a encontrar, se subía bastante bien, los crampones se clavaban y a pesar de la pendiente ya muy dura se subía con facilidad.

Eso si, se sube con facilidad, si no tienes problemas con los crampones, como empecé a tener yo, en el último tramo en plena nieve/hielo uno de los crampones empezó a moverse de su posición, resultaba imposible clavar el pie, un continuo sufrimiento, resbalándome y imposible avanzar, también resultaba inviable pararme a colocármelo bien, debido a que era imposible poderme asegurar en ese momento y ponerme bien el crampón, sumado a la gran idea de dejarse el piolet en el coche, el esfuerzo físico, fue considerable, cosa que me marcó ya hasta el final de la ruta...

Empezaba lo serio

Por fin llegamos al ultimo tramo ya para llegar a la cima, la nieve se convirtió en piedra, pude quitarme los crampones y atacar la cima lo mas cómodo posible, al fin llegamos, las vistas increíbles, ninguna nube nos impedía poder disfrutar del espectáculo, el Aneto en frente, Margalida, Rusell , a lo lejos Vallibierna... todo el esfuerzo había valido la pena.

La cresta hacia el Margalida impresionante

Así se veía la cima del Aneto, lleno de gente

Cima del Tempestades

Eran las 11:30 y decidimos almorzar en un pequeño vivac unos metros mas abajo, el segundo objetivo, el Margalida, lo teníamos a tiro, Lucas y David decidieron llegar a él por la cresta, yo no lo vi claro, a parte de que físicamente no me encontraba en condiciones. y decidí llegar al Margalida pasando por debajo de la cresta, en una especie de huella que vi en la nieve.... gran error.

Hora de comer

Gran error, pues lo que parecía fácil, no lo fue, una nieve que no estaba en condiciones, una inclinación brutal, muchos metros por delante y unos crampones que volvieron a salírseme, lo pasé muy mal, intentando clavar y no irme abajo, llegué al corredor de subida del Margalida y aunque no quedaba nada el esfuerzo físico acabó conmigo y me negué a subir, aun quedaba volver.


Al poco llegaron Lucas y David y ya decidimos volver, no sin antes acercarnos al Rusell y ver si teníamos ganas de subirlo, como encima tuvimos que rescatar a un pobre que se había quedado bloqueado en una pared, ya se nos hizo tarde, así, que decidimos parar a comer y disfrutar del resto del día sin prisas.

Empieza el descenso

Rescatando a este chaval que aun no sabemos como llego ahi

La vuelta fue larga para los 3, la llegada al refugio de Pescadores, sobre todo el ultimo tramo, fue eterno y aunque no llegamos tarde, el refugio ya estaba a tope para dormir esa noche, así que nos tocó dormir en le coche, era eso o dormir con las vacas. xD

Nuestras compañeras de noche

Así aparecía la luna ese día

En definitiva, una ascension dura y exigente, que se puede hacer sin problemas a no ser que empiecen a fallarte los crampones y las fuerzas. Un dia magnifico y con ganas de volver a por la proxima.

Track en 3d

El track esta vez no lo tengo porque falló continuamente el GPS y los datos no son correctos, pero mas o menos son los que puse al principio y en la imagen se puede apreciar el camino, no tiene pérdida